Vistas de página en total

lunes, 14 de marzo de 2011

Aspectos de la Oratoria



La lectura precisa es leer en voz alta exactamente lo que está escrito; no omitir palabras ni letras, ni los signos de puntuación para transmitir la información con exactitud.

La articulación clara es pronunciar las palabras de modo que se distingan netamente los sonidos con buena dicción, con suficiente volumen y a un ritmo moderado.

La pronunciación correcta es decir bien las palabras, articularlas con los sonidos adecuados y pronunciar con mayor intensidad la sílaba que corresponda.

La fluidez es leer y hablar de modo que las palabras y las ideas broten con facilidad y naturalidad.

El uso adecuado de las pausas es hacer interrupciones de duración variable en puntos convenientes del discurso.  El uso acerado de las pausas es fundamental para la buena comprensión del lenguaje hablado.

El énfasis acertado es realzar con la voz palabras y expresiones de manera que los oyentes capten fácilmente las ideas comunicadas.  Ayuda a retener la atención del auditorio, además de conmoverlo y motivarlo.

El énfasis en las idea principales es destacar los conceptos claves de todo el escrito y no solo determinadas palabras en las oraciones.  Para lograr que recuerden el mensaje.

El volumen adecuado es hablar con la suficiente intensidad de voz.  Se determina según: el tamaño y las características del auditorio, los ruidos que distraen la atención, el tema que se está tratando y su objetivo.
Razones para subir el volumen: mantener atento a un grupo grande, contrarrestar las distracciones y captar la atención de los oyentes cuando se dice algo muy importante.

La modulación es variar el sonido de la voz para dar vida al discurso, despertar sentimientos e incitar a actuar.  Graduar el volumen y el ritmo, decir los datos secundarios más rápidos y los datos importantes más despacio.

El entusiasmo es expresarse con viveza o intensidad de sentimiento por estar completamente convencido del valor de lo que se dice.

El afecto y otros sentimientos es hablar de modo que refleje los sentimientos y estar en consonancia con lo que se dice.  El tono de voz como sus expresiones faciales deben reflejar el sentimiento que sea adecuado a la información.

Los ademanes y expresiones faciales son los movimientos que realizamos con las manos, los hombros o el cuerpo entero, a fin de expresar ideas, estados de ánimo o actitudes.  Mover los ojos y la boca así como inclinar la cabeza, para reforzar lo que se dice y transmitir sentimientos.

El contacto visual es mirar por unos instantes los ojos de quienes le están escuchando.

Fuente: imagen tomada de 123RF, http://es.123rf.com/photo_11660746_ilustracion-vectorial-de-microfono-en-el-fondo-blanco.html, 22 de febrero de 2013.

1 comentario: